Aumentan críticas a muro subterráneo egipcio en frontera con Gaza

Opositores políticos, activistas humanitarios y medios noticiosos autodefinidos como independientes navegaban hoy en un mar de críticas y especulaciones por la construcción de un muro de acero subterráneo en la frontera de Egipto con Gaza.

Adversarios del presidente Hosni Mubarak reprobaron el absoluto mutismo oficial respecto a las labores constructivas iniciadas por el gobierno en los 14 kilómetros de límites con el territorio palestino, donde residen 1,5 millones de personas bloqueadas por Israel.

Voceros del ejecutivo alegaron que se trata de un "mantenimiento de rutina" en el muro limítrofe, pero vecinos que optaron por el anonimato aseguraron que las labores de ingeniería incluyen la colocación de barreras metálicas de hasta 30 metros de profundidad.

La frontera natural de Egipto con la Franja de Gaza ha permanecido cerrada la mayor parte del tiempo como parte de un acuerdo de El Cairo con Estados Unidos e Israel para bloquear el enclave dominado por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) desde junio de 2007.

Según las críticas de diversos sectores, incluso provenientes de otros países árabes, el gobierno egipcio procede a construir una muralla subterránea para frenar la proliferación de túneles clandestinos usados por los palestinos para sortear el cerco israelí.

Fuentes periodísticas afirman que el valladar en el que se colocan planchas de acero tendrá una extensión de nueve a 10 kilómetros y una profundidad suficiente como para hacer imposible que pueda ser cortado o fundido por quienes intenten habilitar otro corredor bajo tierra.

Asimismo, señalan que las fuerzas militares de Egipto destruyen o rellenan con gas muchos de esos túneles casi todas las semanas, en ocasiones con personas en su interior, por lo que se incrementaron las muertes de palestinos dedicados al contrabando de mercancías.

Si bien el comercio ilícito de bienes se contrajo debido a esas acciones y a los bombardeos esporádicos ejecutados por la aviación de Israel -que afirma por allí se trafican armas-, continúa floreciente el mercado del contrabando, según residentes.

Un canal televisivo regional reveló que recientemente fueron vistas en el cruce de Rafah patrullas conjuntas egipcio-estadounidenses que empleaban censores subterráneos con el aparente propósito de detectar túneles y bloquearlos.

Ahmed, un egipcio que recientemente visitó la zona relató a Prensa Latina que máquinas excavadoras profundizan en el terreno y luego lo rellenan con arena, mientras en las noches suelen colocar las planchas metálicas con la mayor discreción posible.

Estimados sin confirmación oficial refieren que en la línea divisoria han existido hasta 300 túneles de entre 15 y 30 metros de profundidad, algunos hasta con un kilómetro de distancia entre cada punto de Rafah, una ciudad dividida por la frontera.

Además, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, anunció esta semana la construcción de un muro en la frontera sur con Egipto como "medida inevitable y estratégica" para impedir que la migración ilegal de africanos altere el balance racial en el Estado judío. APL