Los dos hombres, sargentos de infantería, fueron inculpados de "infracción al código militar" por haber obligado a un niño de 9 años a abrir bolsos en los que temían que hubiera explosivos. Finalmente no se encontró ningún explosivo en los mismos.
El niño palestino afirmó que tuvo miedo de morir. "Creí que me iban a matar. Tuve mucho miedo y me hice pipí en los pantalones", declaró el niño Majd R. en un testimonio hecho bajo juramento a la organización Defence for Children International, basada en Ginebra.
"Había dos bolsos. Agarré el primero y lo abrí, mientras que (un soldado) me apuntaba con su arma. Vacié el bolso en el suelo. Contenía dinero y papeles. Miré al soldado, que se reía", dijo el pequeño.
Uno de los acusados declaró a la radio que él y el otro acusado sólo son chivos expiatorios que pagan por las críticas internacionales hechas contra la ofensiva israelí franja de Gaza, lanzada el 27 diciembre por el ejército israelí y que dejó en 22 días más de 1.400 muertos palestinos. Ecodiario
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